Parafraseando a Cervantes, cuando afirmaba por boca del Quijote, que “la libertad es el bien más preciado del ser humano”, podríamos decir que “la salud, es también, el bien más preciado”, un patrimonio que muchas veces se hereda y que, en todo caso, es responsabilidad de cada uno conservar y acrecentar.

Una de las estrategias que se ha demostrado más útil es la divulgación del conocimiento. Explicar el porqué de las cosas y hacerlo de una forma asequible, y si es posible amena, viene siendo tarea de los profesionales de la salud en su entorno laboral, pero también en espacios externos de intercambio de información, es decir, en los medios de comunicación.

La potencia de los medios de comunicación y su importancia en nuestras vidas, lo demuestra las múltiples vocaciones surgidas a la sombra de personajes reales o de ficción aparecidos en la televisión.

Series como Marcus Welby MD, Hospital General, Urgencias, MASH marcaron el desarrollo de muchas carreras profesionales que nos han llevado hasta donde estamos actualmente.

En esa labor y en nuestro país han brillado con luz propia personas como Ramón Sánchez Ocaña, el Dr. Jesús Sánchez Martos, Manuel Torres Iglesias, el Dr. Luis Gutierrez Serantes, Alipio Gutiérrez, y por supuesto el Dr. Bartolomé Beltrán.

Personas llegadas al mundo de la comunicación en la salud desde diversos orígenes, como no puede ser de otra manera, en el caso de una competencia transversal como es la comunicación.

Algunos periodistas que, por azares de la vida o a veces por intuición, tomaron la vía de explicarle al gran público los entresijos de las enfermedades, sus síntomas, las maneras de alcanzar el diagnóstico, los tratamientos simples y complejos, y el pronóstico.

Tachonados, muchas veces, de testimonios personales, de profesionales de la salud y de afectados, pacientes y familiares. Transmitir información con rigor científico y humanidad ha permitido hacer llegar al gran público, muchos de los avances científicos de la medicina de nuestra época.

Todo nuestro agradecimiento, el respeto y el homenaje a estos pioneros de la comunicación sanitaria y el reconocimiento al recientemente fallecido doctor Beltrán por su enorme labor, incluyendo la muy reciente visibilización de la profesión de la anestesiología.

Nuestro mundo no se detiene y nuevos gurús de la comunicación sanitaria, como el Grupo Mediforum, con su transatlático Consalud.es, capitaneado por Juan Blanco y Sergio Blanco, padre e hijo, marcan hoy la pauta de la divulgación sanitaria en España.

Tampoco podemos olvidarnos del poder de las redes sociales, el nuevo ágora, donde pacientes, profesionales y comunicadores nos encontramos para compartir experiencias y explicarnos mutuamente nuestros diferentes puntos de vista.

Internet, las redes sociales, el Big Data, los algoritmos predictivos, la Inteligencia Artificial, son términos que forman ya parte de nuestro lenguaje cotidiano y que van a permitir aproximar aún más la atención sanitaria a las necesidades de los pacientes.

En ese empeño también tenemos puesta nuestra voluntad y continuaremos enseñando y aprendiendo todos los días de todo el resto de la gente para seguir divulgando cuanto sabemos en dolor. Ese es mi compromiso formal con todo el público lector, allanar el conocimiento para ponerlo a su alcance y comprensión.

Publicado por Dr. Alfonso Vidal

Director de las Unidades del Dolor del Hospital LA LUZ (Madrid) y del Hospital SUR (Alcorcón, Madrid). Grupo QUIRÓNSALUD Profesor de Dolor en la Univ. Complutense Madrileña

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